Cuando una empresa envía a trabajar a un empleado suyo a otro país de la Unión Europea, este adquiere la condición de trabajador desplazado en el extranjero, la cual podrá disfrutar de los mismos derechos y condiciones laborales básicas que los trabajadores del país de destino.

Derechos y condiciones laborales de los trabajadores desplazados

Como hemos comentado, los trabajadores desplazados se acogerán a las condiciones laborales del país de destino si son más ventajosas que las del país de origen. Con condiciones básicas aplicables nos referimos a:

  • aspectos relacionados con la remuneración;
  • gastos del viaje, alojamiento o manutención;
  • periodos máximos de trabajo y mínimos de descanso;
  • seguridad y salud en el desarrollo del trabajo;
  • igualdad laboral y de trato entre hombres y mujeres;
  • y, entre otras, condiciones de empleo para mujeres embarazadas.

¿Qué pasa si me mandan a trabajar al extranjero durante mucho tiempo?

No obstante, hay una Directiva europea que recoge que si un trabajador se halla desplazado más de 12 meses (o 18 si la empresa presenta una notificación motivada), se le aplicaran todas las condiciones laborales pertinentes del país de acogida, salvo en dos situaciones que te explicamos en este post en el que detallamos los aspectos de la Directiva que así lo establece: Nuevas directrices sobre trabajadores desplazados

IRPF y trabajadores desplazados al extranjero

Los empleados desplazados en el extranjero durante menos de 6 meses (183 días del año) no deben abonar en el país de destino el impuesto sobre la renta.

Es importante matizar que existe la posibilidad de que a un trabajador desplazado en el extranjero se le considere residente fiscal (y por tanto sujeto a efectos fiscales) de su país de origen, incluso aunque haya permanecido en el país de destino más de 6 meses (por ejemplo, si los lazos económicos y personas son más fuertes en el país de origen). Por ello, te ofrecemos la posibilidad de ponerte en contacto con nuestros profesionales en fiscalidad internacional, los cuales te pueden ofrecer la posibilidad de optimizar fiscalmente los desplazamientos de trabajadores.

Por otro lado, tal y como desarrolla la Agencia Tributaria en su página web, los trabajadores desplazados y que pasen a ser considerados contribuyentes sobre la Renta de No Residentes, podrán comunicarlo a la Administración tributaria a través de la presentación de comunicación 247.

Desde la perspectiva empresarial, muchas optan por internacionalizar sus negocios fuera de España, por lo que merece la pena dedicar un espacio al trabajador desplazado desde el punto de vista empresarial.

Ventajas de contar con políticas para trabajadores desplazados

Fijar una hoja de ruta clara en los procesos de movilidad internacional de empleados desplazados es fundamental para evitar tanto los costes innecesarios como potenciales conflictos. Una de las muchas actuaciones que ayuda a potenciar la movilidad internacional es la elaboración de una buena política de expatriación, fundamental para lograr objetivos tales como:

  • optimizar los costes relacionados con los desplazamientos;
  • homogeneidad y unificación de criterios internacionales;
  • proporcionar cobertura al trabajador desplazado;
  • velar por el cumplimiento de las obligaciones legales y fiscales.

Certificado A1 para trabajadores desplazados

El certificado A1 tiene como finalidad demostrar que el trabajador movilizado cotiza a la Seguridad Social en otro país de la Unión Europea. Para poder obtener el formulario, es necesario demostrar que la actividad laboral que se va a ejercer en el extranjero es similar a la que se llevaba a cabo en el país de origen.

Además, hay que tener en cuenta que si la institución competente descubre que la situación laboral es distinta a la descrita en el contrato y duda sobre la veracidad de los hechos en los que se basa el certificado A1, podría llegar a retirarlo.