Cómo reducir impuestos en una PYME

La gestión de impuestos es una parte crucial para cualquier empresa, especialmente para las PYMES. A menudo, las pequeñas y medianas empresas se encuentran luchando con cargas fiscales que pueden afectar significativamente a sus beneficios.

Sin embargo, con una planificación adecuada y estrategias inteligentes, es posible reducir impuestos de manera legal y eficiente, lo que se traduce en un mayor margen de ganancia.

En este post te contamos algunas estrategias clave para ayudarte a reducir los impuestos en tu PYME para así mejorar tus resultados financieros.

¿Cómo puede una PYME reducir sus impuestos?

Amortizar activos de escaso valor

Tal y como establece la Ley del Impuesto sobre Sociedades, los activos de una entidad que no superen los 300 euros de valor pueden ser amortizados en el mismo año en el que se hayan comprado (hasta el límite de 25.000 euros referido al año impositivo)

Algunos ejemplos de activos que pueden calificar para la amortización de escaso valor podrían ser equipos de tecnología, herramientas que se utilicen durante el día a día, mobiliario de oficina, etc.

Donaciones a entidades en régimen de mecenazgo

En el caso de las empresas, estas pueden deducirse en el Impuesto sobre Sociedades hasta el 40% de una donación que hayan realizado, siempre y cuando el beneficiario sea una organización que esté suscrita al régimen especial de mecenazgo (ONGs o entidades sin ánimo de lucro).

Deducciones por actividades de I+D+i

Si una empresa desarrolla actividades de investigación y desarrollo tiene derecho a practicar una deducción de la cuota íntegra que puede llegar al 25% de los gastos efectuados por estos conceptos.

En esta deducción hay que tener en cuenta que, si los gastos efectuados en la realización de actividades de investigación y desarrollo en el período impositivo son mayores que la media de los efectuados en los 2 años anteriores se debe el 25% hasta dicha media, y el 42% sobre el exceso respecto de ésta.

Deducciones por la creación de empleo

Las sociedades que contraten por primera vez a un empleado menor de 30 años a través de un contrato indefinido pueden deducirse 3.000 euros de la cuota del Impuesto sobre Sociedades.

Además, las empresas con menos de 50 empleados que celebren contratos indefinidos de apoyo a los emprendedores, con desempleados beneficiarios de una prestación contributiva por desempleo regulada en la Ley General de la Seguridad Social, podrán deducir de la cuota íntegra determinados porcentajes en función de diferentes situaciones.

Si hablamos de personas con discapacidad, la deducción por creación de empleo es de 9.000 euros persona/año para un grado igual o superior al 33% y de 12.000 euros persona/año para un grado de al menos el 65%.

Otras deducciones en el Impuesto sobre Sociedades

Además, de las mencionadas, existen otras deducciones que, en función de la actividad profesional de la empresa, puede suponer un importante ahorro de impuestos:

• Deducción por inversiones en producciones cinematográficas, series audiovisuales y espectáculos en vivo de artes escénicas y musicales.
• Deducción por inversiones realizadas por las autoridades portuarias.
• Deducción por contribuciones empresariales a sistemas de previsión social empresarial.

Compensación de bases imponibles negativas en el Impuesto sobre Sociedades

Las empresas también tienen que tener en cuenta que cabe la posibilidad de compensar los beneficios en el IS con las bases imponibles negativas de ejercicios pasados.

• En el caso de que la base imponible sea superior a un millón de euros, cabe la posibilidad de compensar hasta un 60%
• Si la base imponible es inferior a un millón de euros se puede compensar el 100%

¿En qué consiste la compensación de bases imponibles negativas?

En términos muy básicos, la compensación de bases imponibles negativas funciona de la siguiente manera:

1. Cuando una empresa tiene pérdidas en un año fiscal, estas pérdidas se convierten en una «base imponible negativa».
2. En los años posteriores, cuando la empresa obtiene ganancias y debe pagar impuestos sobre esas ganancias, puede compensar parte o la totalidad de esas ganancias con la base imponible negativa acumulada de años anteriores.
3. Esto significa que las pérdidas anteriores ayudan a reducir la cantidad de impuestos que la empresa debe pagar en el presente.

La principal idea detrás de esta compensación es proporcionar un alivio fiscal a las empresas que han experimentado dificultades financieras en el pasado. Permite que las organizaciones utilicen las pérdidas pasadas para reducir sus obligaciones fiscales futuras, lo que les brinda un período de tiempo para recuperarse y volver a la rentabilidad.

Desarrolla una buena planificación fiscal

Para una planificación fiscal efectiva, es fundamental comprender las leyes fiscales locales que se aplican a la situación concreta que atraviesa la empresa, por lo que es altamente recomendable contar con los consejos y la experiencia de expertos asesores fiscales para empresa.

Evalúa tu situación financiera: en primer lugar, es recomendable examinar constantemente las finanzas empresariales para determinar los ingresos, gastos, activos y pasivos. Este control permitirá identificar áreas de oportunidad para reducir el importe a pagar en determinados impuestos.

Maximiza las deducciones disponibles: Además de las deducciones que hemos explicado anteriormente, existen otras muchas más concretas enfocadas a determinadas actividades empresariales, por lo que en este sentido también es recomendable contar con los servicios de un asesor fiscal que te ayude a aprovechar todas las deducciones fiscales que tengas disponibles.

Ten en cuenta la forma jurídica que vas a adoptar: No tributa igual una PYME que un autónomo. La elección de una estructura legal adecuada puede tener un impacto significativo en tu carga fiscal.

Planifica pensando en el largo plazo: Considera cómo tus decisiones financieras afectarán tus impuestos en el futuro. La planificación a largo plazo puede ayudarte a tomar decisiones más informadas.

Cumple con los plazos de presentación de las declaraciones: también es crucial que te asegures de presentar las declaraciones de impuestos a tiempo y de manera precisa. El incumplimiento de los plazos puede resultar en penalizaciones y recargos.

Cuenta con la ayuda de un profesional en impuestos: también es altamente recomendable contar con un experto en la materia que esté al tanto de todas las novedades y de las leyes fiscales. De esta manera te asegurarás de que estás aprovechando todas las oportunidades fiscales.

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