A la hora de crear una sociedad en España, uno de los conceptos fundamentales que hay que conocer es el de capital social. En este post te explicaremos con precisión qué es exactamente esta figura y por qué es crucial para el funcionamiento y para el éxito de la empresa.
¿Qué es el capital social de una empresa?
El capital social de una empresa es la cantidad de dinero o valor en bienes que los accionistas o socios aportan a la hora de fundar la empresa.
Dicho de otra manera: es la inversión inicial que permite a la empresa llevar a cabo sus respectivas actividades y que funciona a su vez como base económica que respalda la responsabilidad de la empresa ante terceros.
Esta inversión funciona como aportación que debe realizarse en el momento de la constitución de la sociedad. No es una aportación definitiva, ya que, tal y como explicamos más adelante, se pueden realizar ampliaciones de capital.
Un capital social adecuado demuestra solidez financiera, lo que se puede traducir en un aumento de la confianza de los clientes, proveedores y colaboradores, lo que facilitaría por ejemplo la obtención de créditos.
Además, un capital social inicial potente permite a la empresa afrontar con solvencia todos los gastos iniciales que se derivan del inicio de la actividad empresarial. Estas aportaciones pueden ser dinerarias o en especie (bienes muebles, inmuebles, etc).
¿Tienes intención de constituir una sociedad en España? En tal caso debes saber que, dependiendo del tipo de sociedad que se vaya a constituir, la ley normativa española exige que se aporte un capital social mínimo.
¿Qué función tiene el capital social?
El capital social inicial de una sociedad funciona como primera entrada de fondos necesarios para iniciar la actividad económica de una empresa.
Asu vez, funciona como garantía de la sociedad para que pueda responder de las posibles deudas que contraiga frente a terceras entidades.
En relación con los socios, el capital social aportado fija el porcentaje de participación y propiedad sobre la entidad (cada socio puede aportar la cantidad que considere, no existe obligación de que se tenga que aportar a partes iguales).
Capital social mínimo para una S.L y para una S.A
Tal y como indica la normativa española, el capital de la sociedad de responsabilidad limitada no podrá ser inferior a un euro (antes el mínimo era de 3.000).
Mientras el capital social de las S.L no alcance la cifra de 3.000 euros, se aplican una serie de reglas que se deben cumplir:
- Deberá destinarse a la reserva legal una cifra al menos igual al 20% del beneficio hasta que dicha reserva junto con el capital social alcance el importe de tres mil euros.
- En caso de liquidación, voluntaria o forzosa, si el patrimonio de la sociedad fuera insuficiente para atender el pago de las obligaciones sociales, los socios responderán solidariamente de la diferencia entre el importe de 3.000 euros y la cifra del capital suscrito.
Capital social mínimo para una Sociedad Anónima
Por su parte, el capital social de la Sociedad Anónima (S.A) no puede ser inferior a 60.000 euros.
¿Cuál es la diferencia entre capital social y patrimonio?
Los titulares del capital social son los socios fundadores de la empresa, mientras que el patrimonio de la sociedad lo forman todos los bienes, derechos, deudas y obligaciones que contrae.
¿Se puede ampliar el capital de una empresa una vez constituida?
Sí, y además se puede hacer de dos formas diferentes: con nuevas aportaciones de capital por parte de los socios de la empresa o a mediante la entrada de nuevos socios.
Además, en este punto es importante tener en cuenta que los socios pueden aportar sin que ello suponga necesariamente un aumento de capital. Te explicamos esta situación en este otro post: aportaciones de socios sin aumento de capital – Acta del 118.